Como una gota de material incandescente, Glass Drop recueda la naturaleza mágica y elusiva del vidrio soplado, en el instante en que es a la vez fluido y sólido, justo antes de que tome forma. La forma ligeramente ondulada de la parte superior acentúa armónicamente el efecto de gota. En la versión cromada, su superficie se refleja como un espejo cuando está apagada, mientras que cuando está encendida deja pasar la luz: una lámpara que cambia de personalidad con un simple toque del interruptor. Glass Drop también está disponible en una versión blanca que se adapta perfectamente a cualquier entorno. Glass Drop es especialmente llamativa en composiciones múltiples, como una joya compuesta de muchos colgantes que integra la funcionalidad y la armonía del rasgo.